miércoles, 29 de noviembre de 2023

Esclava de ti

 


Quién respira tu aroma

en la plateada rivera

que manda vientos a mi alcoba
y desdeña mi querella.

Quién es ella y porqué no yo
si la prima vez que tus ojos tuve
pude amarlos con tanta fuerza
que partir pudiera Europa en dos.

¿Qué técnicas domina el diablo
para retener tus besos en su boca
que no aprender pudiese yo?

Despues de todo mi lamento,
después del rapto de mi amor,
sola vivo y sola quedo
suplicando un corazón
que apenas derramarse en mis manos
sometiera este dolor.
Pero el diablo es tenaz y vivo
y contra el mal ¿qué puedo yo?

Más valiese mi cuerpo abrasar
a esta condena y prisión.
Más valiese la muerte temprana
a la esclavitud de esta pasión.

miércoles, 18 de octubre de 2023

Qué haré, señor mío

 Qué haré con la vida

que me lanza al mar

que me empuja a vivir

sin tener un caballo.


Qué haré cuando el miedo

haga una casa en mis rodillas

y le grite a mi reflejo

para ahogarme en la desidia

del trauma que es existir.

jueves, 28 de septiembre de 2023

La vida es gris

 


La vida es gris

gris oscura.

La noche es caos,

tristeza desnuda.


Y tú no estás.

No hay nadie.

Sólo yo y esa ventana de luz tenue

que se apaga en mis costillas.

Tan solitario que desgarrar

la carne pudiera

como un caimán hambriento.


Pues la vida es gris

gris oscura.

El día me asfixia

y la soledad arruya.


jueves, 2 de febrero de 2023

Deshumanizados

 



En la muerte todos pierden
lo que quieres, lo que tienes
que en la vida no merece
tanto el rico como el pobre.
No es un no, es el sino
el que prima y el que muerde
que la angustia no domine
y que hasta el día haya suerte.


El que aquí no quiera estar
la horca tiene como aliado
pero ha de ser cobarde
pues la vida es un regalo.

Tanta sangre derramada
está creando nuevos mares
y quienes rondan estos lares
hoy ya son los olvidados.

Somos un futuro incierto
paradigmas de conquista
bajo el yugo del esclavo
entre llantos más que risas.

¡Que la guerra no desista!
grita el rey desde su palco
mientras muere tu familia
por las balas que has usado
en nombre de la avaricia,
que justicia hoy la llaman
por un dios que no existe
porque juegan con sus manos
a crear ideas falsas, utopías de la mente
que te creen hacerte fuerte
por el dios que te han nombrado.

Nadie es libre, es la condena
del que quiere ser llamado
a la gala de los grandes
paraíso del engaño.
En la muerte todos pierden
lo que quieres, lo que tienes
que en la vida no merece
tanto el rico como el pobre.
No es un si, sino es el sino
el que plañe y se retuerce
que la angustia no domine
y que hasta el día haya suerte.

Trabajar es para tontos
he oído decir a tantos
con odio pero no atentos
a la tierra que están pisando.
Entretanto va enrendando
el demente en el establo
que ha escuchado a su pastor
que ha de obedecer al amo.
Tanta tinta tonta tienta
a embrujar a más cristianos
islamistas o judíos,
hinduístas o africanos
¿Acaso no te lo preguntas?
¿Nunca te lo has cuestionado?
El ser humano no se ayuda
solamente nos matamos.

No hay amor con tanta pena,
quejidos, reproches y maldad.
Si por cada abrazo una vela
El mundo fuera oscuridad.

Nos han quebrado el instinto
crecimos deshumanizados.

Y entre el calor de tus mantas,
mientras bebes de esa copa
más te llenas de ponzoña
mientras crece tu barriga
te alimentas de carroña,
tan deprisa que el cerebro
se ha infectado de gusanos
y sin tiempo de pensar
ya te tienen dominado.

Ya eres otro más que usar.

Más no hay enojo, sino pesar
de saber que es más sencillo
destruir a dar un beso
calumniar a ser cumplido.

Y al final de todos los senderos
a virtuosos y perversos,
bondadosos y maliciosos
nos hundirá la tierra el cuello.

En el trance todos pierden
lo que quieren, lo que tienen
pese a sujetar con fuerza
las cadenas que les mecen.

Qué más da que seas humano
animal o ser sintiente.
Al final todo es en vano:
somos vida y somos muerte.

domingo, 29 de enero de 2023

Hasta el tuétano




No sangra el poeta,

sangra el papel que talla

sus versos.



La flora mental frondosa y viva

socava la memoria hasta el tuétano

y no es capaz de olvidar.



Como un cazador que su presa marca

y tras ella corre como viento de poniente

injerta su amorosa bala

directa a donde matar logre

despacito, como más duele,

así fui cierva yo

y así cercené mi mente.



Qué más de mí que dar

qué más de mi malherido vientre

a ti que sabes amar

a quien no lo merece.